lunes, 8 de agosto de 2011

THE SILVER PIGS (LINDSEY DAVIS)

“He explained that he did not dislike the informers as such, only the work that they did. I confided that I felt much the same about Emperors.”

The silver pigs

Lindsey davis

Quien desde aquí les escribe se ha divertido tanto este año entre sus bachilleres que, aun en vacaciones, no deja de pensar ilusionada en el próximo curso y ha dedicado estos días a la lectura del que muy probablemente vaya a ser texto obligatorio para los latinistas debutantes de 4º de ESO. Pensé en un primer momento en aprovechar para tal fin las aventuras de Gordiano ‘el Sabueso’ de Steven Saylor, que tanto disfruté de adolescente, ambientadas como estaban en los convulsos años de lo que Ronald Syme denominó la crisis de la República, la de Mario y Sila, la de Catilina y, por supuesto, Cicerón. Pero hace unos cuantos años que los títulos de Saylor han desaparecido de las librerías y nuestros adolescentes de hoy, con sus muchas virtudes, no brillan precisamente por su constancia, así que he creído más apropiado encomendarles algún título que puedan encargar con mayor facilidad, La plata de Britania de Lindsey Davis, por ejemplo.

He dedicado estos últimos días a conocer al carismático detective Marco Didio Falco, protagonista de una serie que alcanza ya una veintena de títulos e incluso una guía oficial recién publicada. La trama entretiene y está bien construida, por más que el desenlace y sus giros sean más que previsibles. El protagonista tiene verdadero potencial y sólo en cierto modo participa del estereotipo del género, aunque esta lectora no acaba de entender el enamoramiento inicial por la víctima, Sosia Camillina. Last but not least, su autora sólo a veces comete un error frecuente en novelas ambientadas en una época tan lejana en el tiempo como la Antigua Roma, verse en la necesidad de explicar y describir más allá de lo que la trama precisa. Al fin y al cabo, una cosa es una novela y otra bien distinta una lección de Historia. Pero esta es tan sólo mi opinión. En unos meses estaré en condiciones de traerles por aquí el parecer de mis adolescentes, si consigo que la lean. Y, ahora, les dejo. Voy a preparar un examen.


3 comentarios:

Elena Rius dijo...

Commo fiel seguidora de Lindsey Davis -bueno, confieso que no he leído los veinte títulos publicados hasta ahora, pero sí muchos de ellos-, me alegro de que tus alumnos vayan a leerla también. Creo que debería gustarles, al menos es una lectura muy amena y que les aportará informaciones sobre la vida en la Roma imperial. O eso hay que esperar.

CEci dijo...

También yo creo que les gustará, aunque con los adolescentes nunca se sabe. Me conformo con que se divierta. Si de paso recuerdan quién era Vespasiano... mejor que mejor. ¡Abrazos!
P.S. Para cuando continúe con Falco... ¿qué me recomiendas?

Elena Rius dijo...

Mmm.. A ver, si quieres seguir con Falco, lo mejor es leer sus aventuras por orden de publicación. Pero hay otras novelas históricas que podrían triunfar también con los adolescentes ( y que tienen suficiente verosimilitud histórica detrás), por ejemplo las de Simon Scarrow y sus legionarios Macro y Cato. Mis hijos las han leído todas con fruición, y no siempre aceptan mis recomendaciones, pero esta cuajó.